"Trabajo, insistencia, tesón, paciencia y esfuerzo deben ser nuestras armas ante el funesto escenario en el que nos movemos, uno donde el actual Gobierno no tiene a la cultura como una de sus prioridades, sino como una especie de mal que hay que ir eliminando paulatinamente. "
Estamos encantados de acoger en Castle Rock
Asylum a uno de los escritores de fantaterror nacional más activo y al que
conviene no perder la pista. Damos la bienvenida a Tony Jiménez:
-Para empezar, háblanos
un poco de ti.
-¿De mí? Qué pronto queréis que empiece a
aburriros. La verdad es que poco tengo que contar de mí. Soy un escritor
malagueño de terror que tras años juntando palabras para uso personal decidió
dar el salto a Internet, concretamente, a páginas de relatos. Al ver que,
sorprendentemente, gustaban, me atreví a intentar publicar en papel, no sin
unos buenos empujones por parte de gente que siempre tengo a mi lado,
apoyándome. Los principios fueron duros, pero poco a poco me fui abriendo paso,
descubriendo que quienes me publicaban estaban más locos que yo, por suerte
para mí.
-Cuéntanos por qué
elegiste especializarte en el género de terror.
-En realidad, yo creo que eso no se elige, que
se fusiona con nosotros, los escritores, conforme leemos, crecemos y empezamos
a juntar letras como locos. Es entonces cuando vamos eligiendo uno u otro
género. Incluso los autores que afirman que ellos no se dedican a uno solo,
sino a varios, tienen uno predilecto. Negarlo no tiene sentido, ni tampoco es
malo dedicarse a uno, por completo o en un porcentaje mayor en comparación a
otros. En mi caso, siempre me ha encantado el terror, tanto en la literatura
como en el cine, sin olvidar otros ámbitos. Antes de que Stephen King me
enseñara a amar el terror literario ya me encantaba gracias a genios como Lovecraft,
Poe, Stoker, Matheson y Stine, y mejor ni hablar del cine que veía siendo
peque. Recuerdo que al leer a mis ídolos siempre pensé que ojalá pudiera hacer
lo mismo que ello, hilar historias, crear mundos de la nada, parir personajes y
aterrorizar al lector con las pesadillas que nacieran de mi imaginación. Es un
sueño hecho realidad comprobar hoy que lo hago, o al menos lo intento. Que el
lector no duerma tranquilo es uno de mis objetivos. ¿Cómo no me voy a querer
especializar en eso?
-¿Tienes alguna manía o
habito especial a la hora de escribir?
-Pocas, por no decir ninguna. La única
reseñable es que necesito varias horas por delante sin nada que hacer para
poder sentarme y escribir a gusto. ¿El motivo? A veces me abstraigo tanto al
escribir que cortar el proceso por alguna razón me enerva bastante, así que
prefiero tener varias horas libres para poder escribir todo lo que quiera,
hasta tener que parar sólo para tomarme un descanso, sin interferencias
externas.
-¿Qué autores y obras te
han influido más?
-Creo que nombrar a Stephen King a estas
alturas sería hasta redundante, ja, ja, ja. En todo caso, no podría hablar de
obras, sino más bien de autores, y hay mucho más que el de Maine entre mis
referencias directas. Edgar Allan Poe, H. P. Lovecraft, Richard Matheson, Joe
Hill, Clive Barker, Ramsey Campbell, John Katzenbach y R. L. Stine son los
ejemplos más evidentes, y eso sin entrar en el terreno de los cómics, donde
idolatro a Alan Moore, Garth Ennis, Brian Michael Bendis, Grant Morrison, Scott
Snyder, Frank Miller y Jason Aaron entre muchos otros. La lista es larga a
pesar de que King sea la principal influencia en mis obras, como bien
atestiguan "Cinco tumbas sin lápida" y "Tormenta
Sangrienta", aunque los otros autores están ahí, de un modo u otro, pero
están.
-Eres un autor que empezó
con relatos y que nunca ha perdido la oportunidad de participar en antologías y
convocatorias de este tipo. ¿Cuáles son las ventajas y desventajas frente a
escritos de mayor extensión (y viceversa)? ¿Crees los autores noveles deberían
empezar escribiendo relatos?
-La principal ventaja de un relato con respecto
a una novela es que el impacto es mayor. Es un puñetazo directo al estómago, o
debería serlo. Los giros argumentales que puedes añadir a una historia más
larga, en estos casos deben ser mejor economizados, hasta el punto de que uno
de ellos debería ser el final del cuento, dejando al lector con cara de
circunstancia, o así debería ocurrir. Por supuesto, un relato se suele terminar
antes que una novela debido a su extensión, aunque todo depende del proceso
creativo del escritor, pero es lo lógico por norma general. ¿Desventajas? Un
relato te obliga a ir a lo primordial, a que la historia prevalezca sobre los
personajes, los detalles y lo que la enriquece. Por ejemplo, los protagonistas
y la amenaza, en caso de existir una, no pueden desarrollarse, ya que ese
espacio debe ir dedicado a que la trama avance. La novela sí permite un
desarrollo tanto de los acontecimientos como de los personajes alrededor de
quienes se producen. Podría poner muchos ejemplos más al respecto, ventajas y
desventajas para novela y relato, pero yo creo que lo principal en ambos casos
es el desarrollo y el impacto hacia el lector, sin olvidar el tiempo de lectura
que le quiera dedicar éste a según qué trabajos. En ocasiones apetece una
novela de más de mil páginas, y a veces hay más ganas de un cuento de cinco. Lo
cierto es que es un tema que podría dar perfectamente para todo un interesante
libro de ensayo, y además ya hay varios por ahí.
En cuanto a la pregunta sobre si los autores
noveles deberían empezar escribiendo relatos, bueno, reconozco que soy de los
que piensan que cada maestrillo tiene su librilllo, en especial en este universo
de letras e imaginación. Uno tiene que ir a por lo que le funcione a él, sin
pararse a pensar sobre cómo les va bien al resto de escritores, al menos no de
forma obsesiva. Sin embargo, personalmente opino que sí, que los relatos son un
buen entrenamiento antes de embarcarse en algo más largo, y no sólo para los
autores noveles, sino para los veteranos. Escribir un cuento pone a prueba a
ambos tipos de juntaletras por las razones antes mencionadas, regalar una
historia corta en un breve espacio, un relato que debe tener sus personajes, su
bien hilada trama, cierto desarrollo, su correcto desenlace y llegar al corazón
del lector, que no sea sólo de usar y tirar. Cuando veo a autores publicando
novelas directamente sin haber trabajado antes el relato me echo a temblar. Si
hacemos un repaso a muchos de los mejores novelistas de la historia de la
literatura, encontramos que además eran todos, o al menos la mayoría, grandes
autores de cuentos. King, Lovecraft, Matheson, Barker y Poe tienen relatos tan
buenos como sus mejores novelas. Por ejemplo, no son pocos lectores los que
prefieren al King cuentista que al novelista, lo cual ya quiere decir mucho.
Siempre he creído en ir escalando poco a poco, y pasar de relatos a novelas me
parece lo más apropiado, sobre todo sin prisas, con paciencia, una de las
principales armas que todo escritor debe utilizar con acierto en su carrera.
-Toca hablar de tu última
novela y de su fantástica e inquietante portada. Háblanos de "El que se
esconde" y de lo que nos encontraremos en sus páginas.
-Muchas gracias por el piropo hacia la portada.
Almu CJ se supera a cada nueva colaboración que realizamos, y si ya las
cubiertas de "Tormenta Sangrienta" y "Actos de Venganza: Edición
definitiva" me parecen sobresalientes, la de "El que se esconde"
me parece de matrícula de honor... como poco. Es su mejor obra hasta ahora,
aunque tal y como mejora con cada nueva portada, igual con la siguiente es
capaz de superarse por mucho.
¿Qué os encontraréis en "El que se
esconde"? Una historia de fantasmas, ni más ni menos. He intentando
trasladar la sensación de aquellos relatos alrededor de una fogata, o los
narrados para aterrorizar a quienes intentan entrar en la casa encantada de
turno, a "El que se esconde", fusionando el clasicismo de los cuentos
fantasmales más clásicos con los más actuales, tanto de la literatura como del
cine. Puertas que chirrían, ouijas que conectan con terrible seres del más
allá, psiquiátricos abandonados, susurros bajo la cama, sombras que se mueven
dentro del armario, leyendas urbanas, juegos aterradores que son muy reales,
pasillos de hospital con la noche como escenario, antiguos cines que ocultan
horribles secretos, cajas misteriosas... Todo eso y mucho más encontraréis en
"El que se esconde", además de ahondar en el área más psicológica de
los fenómenos sobrenaturales. En pocas palabras, he intentado dejar de lado el
terror más físico de "Cinco tumbas sin lápida" y "Tormenta
Sangrienta" para centrarme en un terror más hacia lo desconocido, hacia el
terror psicológico con fantasmas y la locura de por medio. Espero haberlo conseguido.
Vosotros, lectores, tenéis la última palabra.
-Debo reconocer que no me gusta lanzar halagos
hacia mis propios trabajos, y siendo un escritor de terror, afirmar que es mi
obra más aterradora sería provocar que el cruel bichejo del ego asomara su fea
cabeza, así que pondré por delante las opiniones de los lectores de "El
que se esconde". Y sí, hay mayoría en lo referente a que es mi novela más
aterradora, incluso entre los que prefieren "Tormenta Sangrienta", quienes admiten que "El que se esconde" da más miedo. Es el mejor de
los piropos. Siempre pretendo dar miedo con lo que escribo, pero en este caso
deseaba ir más allá, provocar que el lector no pudiera dormir sin la luz
encendida, y que incluso así le costara trabajo. Parece que lo he conseguido
con unos cuantos. Hay que admitir que los fantasmas siguen dando mucho miedo,
así que la elección del tema a tratar en "El que se esconde" ha
ayudado bastante.
-Ya llevas publicado con
varias editoriales, cuéntanos en qué se diferencia Dilatando Mentes de las
demás.
-Uf, complicada pregunta. Es difícil porque
ahora mismo estoy trabajando regularmente con tres editoriales cuyos editores
tienen mucho en común, así que no va a ser fácil contestar a esta cuestión. La
mayor diferencia radica en las ediciones de Dilatando Mentes, y no hablo ya de
lo cuidadas que están, sino en todo lo que traen, una ingente cantidad de
extras que llevan la experiencia de la lectura más allá. Es uno de los lemas de
Dilatando Mentes, en realidad el principal, que sus libros sean algo más que
páginas impresas llenas de letras que leer. Buscan una experiencia completa,
que impacte en el lector de la cabeza a los pies, y para ello sus ediciones
traen ensayos, añadidos conectados con la historia de la novela, prólogos muy
especiales, notas del autor, ilustraciones, incluso algún que otro cómo se hizo
para descubrir los secretos del escritor a la hora de hilar la trama. Y eso sin
contar con todo lo que te da de regalo la editorial si pides sus libros
directamente a ella, como por ejemplo, postales de las ilustraciones
interiores. Una gozada.
-Por lo visto, las
publicaciones de Dilatando Mentes, vienen acompañadas de varios extras
literarios al más puro estilo DVD/Blu-ray. ¿Crees que esta práctica podría ser
una de las formas de impulsar la literatura en nuestro país?
-Todo ayuda, y creo que los extras a lo
DVD/Blu-Ray, nunca mejor dicho, aportan un plus al lector, un añadido bastante
jugoso para disfrutar todavía más la lectura. No digo que sean imprescindibles
para que el libro le guste al lector, pero consiguen completar un cuadro
bastante agradable cuando eso ocurre. Las personas que se han acercado a las
ediciones de Dilatando Mentes han agradecido mucho la incorporación de los
mencionados extras, por lo que sí que me parece una gran manera de impulsar la
literatura.
-Desde luego, eres uno de
los autores que más apoyan a las jóvenes editoriales que proliferan bastante en
un actual panorama literario que muchos consideran preocupante. ¿Qué opinas tú
de todo esto?
-Opino
que el panorama es muy negro, pero pesimistas es lo último que debemos ser, y
hablo por todos, desde escritores hasta editores, pasando por ilustradores,
correctores, traductores... Con el pesimismo no se consigue nada, y si uno lo
ve tan, tan oscuro, lo mejor que puede hacer es dejarlo y dedicarse a otra
cosa. Siento decirlo tan a las bravas, pero una cosa es apegarse a la realidad
y otra es ponerte a escribir una novela pensando que vas a ganar dos euros en
el mejor de los casos, y eso si alguien te lee al final. Trabajo, insistencia,
tesón, paciencia y esfuerzo deben ser nuestras armas ante el funesto escenario
en el que nos movemos, uno donde el actual Gobierno no tiene a la cultura como
una de sus prioridades, sino como una especie de mal que hay que ir eliminando
paulatinamente. ¿Culpar a las grandes editoriales? ¿Culpar a los famosillos de
tres al cuarto que sacan un libro que sólo sirve para decorar? En absoluto.
Este mundillo también es un negocio, y hay que sacar dinero, así que toca
publicar ciertos libros más allá de su calidad literaria, algo que suele ser
muy subjetivo en muchos casos.
Ante este camino tan delimitado, y que las
editoriales grandes no quieren abandonar en lo más mínimo, tenemos las
editoriales pequeñas, las que más arriesgan y, curiosamente, las que más
apuestan de un tiempo a esta parte por la literatura de género, es decir, por
el terror, la fantasía y la ciencia-ficción. Y en abundantes ocasiones son
ellas las que van marcando la dirección correcta a las grandes. ¿Quién no se
sabe ya en el circuito literario cómo fue todo el tema del fenómeno "Juego
de Tronos" en nuestro país? ¿Muchas editoriales grandes habrían apostado
por la literatura Z si Dolmen no hubiera apostado por ella? Afortunadamente,
las editoriales grandes se van abriendo a las políticas que las editoriales
pequeñas llevan a cabo con mayor alegría. Desgraciadamente, lo van haciendo con
una lentitud exasperante, pero escritores como Jesús Cañadas y Juan Cuadra,
entre otros, son ejemplos geniales de que se puede escribir terror y fantasía
al mismo tiempo que se trabaja con editoriales enormes. Hay mucho que cambiar
todavía, y aunque se está haciendo, me temo que los pasos que se están dando
van a una muy baja velocidad. Pero creo que vamos por el buen camino, que
conste. Después de todo, ¿quién se hubiera imaginado hace diez años un panorama
editorial como el de hoy en el campo del fantaterror?
Eso sí, no cambio mi experiencia con las
pequeñas editoriales por nada. No es sólo que el trato sea mucho más
personalizado, cercano y familiar, sino que permiten aproximarte a la
realización del libro desde todos los aspectos posibles, pudiendo implicarte al
cien por cien. Además, la atención que recibes es continua, algo que yo
considero primordial. Nunca eres una simple pieza sin apenas importancia, sino
un engranaje esencial en el que se vuelcan los editores todo lo que pueden y
más. También debo añadir que crecer junto a una editorial es una experiencia
única. Al fin y al cabo, las editoriales grandes también fueron pequeñas un
día, y acogieron en su seno a autores que era meros desconocidos por entonces,
y grandes estrellas hoy.
-Hace poco que nos has
descubierto la existencia de Darkgate. Un cómic en el que estás implicado y que
parece que aúna el género de superhéroes y el terror. ¿Qué nos puedes contar
sobre este proyecto?
-Os puedo contar poco porque está prácticamente
en pañales. Nace a partir de mi relato "La oscuridad que devora",
protagonizado por un héroe llamado Dark, e incluido en una antología pulp que
salió hace ya la friolera de tres años largos. Como gran amante de los cómics,
siempre quise darle continuidad literaria al personaje, que se mueve en un
mundo que mezcla la mitología de Batman con la de los mitos de Lovecraft, algo
que hice en una novela corta que está valorando actualmente una editorial
especializada en bolsilibros. En realidad, siempre he tenido ganas de realizar
algún cómic, y el dibujante José Raúl Orte Crespo me propuso hacer algo juntos
un par de veces, así que le pasé algún que otro relato de terror, fiel a mi
estilo, demasiado largos para ponernos con un cómic que no acabase en un
extenso tomo. Fue entonces cuando se me ocurrió pasarle el relato de Dark, el
cual le encantó, poniéndose manos a la obra y pasándome las primeras páginas
entintadas en cuestión de un par de semanas, tiempo récord, diría yo. Y atentos
a la calidad que atesoran todas y cada una de las viñetas de Raúl, porque
ninguna de ellas tiene el menor desperdicio. Lo que está haciendo es una
maravilla, convirtiéndose en el otro padre de Dark, dando su propia versión de
la historia que le pasé.
Los planes pasan por publicar un primer tomo,
no tocho por supuesto, y continuar creando aventuras para Dark que naveguen
entre el terror y el subgénero de superhéroes. Eso sí, los siguientes cómics no
serían adaptaciones, sólo el primero, que llevaría el título del relato,
"La oscuridad que devora", aunque en realidad se llamaría
"Darkgate: La oscuridad que devora", para relacionar la historia con
Darkgate City, la oscura urbe en la que se desarrollan las acciones justicieras
de Dark. Tenemos suerte, porque un par de editoriales se han interesado por el
cómic, aunque sin tenerlo terminado no queremos vender la piel del oso no ya
antes de cazarlo, sino de escucharlo en el bosque. Vamos despacio, con los pies
en el suelo, así que toca terminar el cómic, buscarle familia editorial y
esperar que sea el primero de una serie regular. Por soñar que no quede.
-Está siendo tan buena como diferente a
escribir una novela. Lo cierto es que incluso me parece complicada en algunos
aspectos. Me cuesta acostumbrarme, aunque viñeta a viñeta me voy notando más
suelto. Espero que el resultado sea satisfactorio, en especial para el lector.
Ya me dirá Raúl qué tal cuando vaya leyendo las primeras páginas. En cuanto a
si seré un habitual como guionista de cómics, me encantaría repetir la
experiencia con los próximos números de "Darkgate", aunque como decía
antes, paso a paso. Veamos qué tal le va al primero, y luego hablaremos.
Además, hay algún que otro proyecto de cómic con Applehead Team Creaciones para
crear algo cercano a "Historias de la cripta", así que me tendréis
dando la brasa comiqueramente durante un tiempo, aunque no de forma exclusiva,
tranquilos.
-Lo que nos tiene que
quedar claro de ti es que eres todo un todoterreno. También estás a punto de
lanzar el primer volumen de Here´s Johnny! un ensayo completísimo sobre toda la
obra y adaptaciones de los escritos del gran Stephen King. Aparte de los
problemas debido a que el maestro del suspense tampoco para de publicar, ¿has
encontrado alguna otra dificultad más a la hora de enfrentarte a esta nueva
muesca en tu culata literaria?
-Ese ha sido el mayor escollo, la verdad. Han
aparecido otros, por supuesto, como el hecho de que es muy diferente escribir
una novela que un ensayo (el estilo es completamente distinto), y todo el
trabajo que lleva detrás el confirmar ciertas informaciones no demasiado claras
sobre King, en especial cuando se referían a declaraciones realizadas por él.
Con el transcurso de los años, el de Maine ha cambiado de opinión acerca de
algunos temas, además de que ha sido más claro en cuanto a otros e incluso ha
descubierto que no decía del todo la verdad con respecto a detalles de su vida
personal. Por ejemplo, con el tiempo se ha aclarado lo que verdaderamente
sentía King hacia el filme "El Resplandor", y no es que lo odiase. En
realidad, siempre estuvo molesto con Stanley Kubrick por no aceptar su guión y
cambiar tanto la historia principal que apenas quedó nada de ésta. Hemos tenido
que ser muy precisos con este tipo de datos para no contradecirnos en el ensayo
y, por supuesto, para no confundir al lector. Si en el libro dice una cosa, y
luego el lector descubre otra diferente fuera, es que no hemos hecho bien
nuestro trabajo de documentación. Eso ha llevado mucho tiempo y esfuerzo,
aunque nada comparable al hecho de actualizar continuamente el ensayo, sobre
todo el segundo volumen, que comprende la etapa más moderna del autor.
-Estoy dándole los últimos retoques al segundo
volumen de "Here´s Johnny! Las pesadillas de Stephen King" al mismo
tiempo que escribo "El Hombre Lobo vs. el monstruo de Frankenstein: Guerra
en Los Ángeles", la secuela directa de "Drácula vs. la Momia: Batalla
por Chicago" que publicaré con Ediciones El Transbordador. Inmediatamente
después me pondré con la siguiente novela de terror para Dilatando Mentes, la
cual tendrá como escenario un bosque... y poco más puedo contar al respecto.
Bueno, que será como si "La Niebla" de Stephen King se encontrase con
"Silent Hill". ¿Os anima eso a leerla?
-Sabemos de tu afición
por el cine, y nos gustaría preguntarte: Si pudieran adaptar alguna de tus
obras, ¿Cuál sería y a quién elegirías para dirigirla y protagonizarla?
-Uf, por mí que las adapten todas. No te podría
decir otra cosa, la verdad, aunque el tema de que una de mis obras acabe en la
pantalla grande (o pequeña) no me quita demasiado el sueño. Es un extra, uno
muy jugoso y de ensueño, pero no es a lo que me dedico en realidad. Prefiero
continuar publicando y que mis trabajos lleguen cada vez a más lectores, a
pesar de que el cine es una parte muy importante de mi vida, claro. Lo curioso
es que suelo designar actores y actrices reales a mis personajes para tener
claros sus rasgos físicos, por lo que no me costaría realizar un reparto para
cualquiera de mis novelas, ¡ya los tengo! Sin ninguna preferencia concreta, me
iré a por el de "El que se esconde", ya que es el título del que
estamos hablando. Por supuesto, me encantaría que la dirigiese James Wan, y la
protagonizarían Jeremy Renner y Kate Mara. Seguro que quienes se han leído ya
la novela saben a qué personajes interpretarían.
-Nos gustaría saber la
última película/serie que has visto, el último libro/cómic que has leído y la
última canción o álbum que has escuchado y tu opinión.
-Uy, toca hablar de aficiones. Pues la última
película que he visto ha sido "Expediente Warren: El caso Enfield";
me he ido a por la pantalla grande, y lo cierto es que la he disfrutado tanto
como la primera entrega, e incluso más en alguna que otra escena, pareciéndome
que están ambas al mismo nivel. En cuanto a series, actualmente me estoy poniendo
al día de "Sobrenatural"; los hermanos Winchester son sagrados para
mí, llevan ya once temporadas y podría verlos durante once más. Si hablamos de
libros, actualmente estoy inmerso en la magnífica edición de "Los cantos
de Maldoror" de, precisamente, Dilatando Mentes; tenía muchas ganas de
volver a sumergirme en el horror que plantea este curioso título que hacía años
que no leía. Y si nos vamos a por los cómics, estos días me estoy poniendo al
día con "Batman" de Scott Snyder y Greg Capullo; para mí, una de las
mejores etapas del personaje, a pesar de transcurrir en el reboot de los New
52. En cuanto a música, estos días no dejo de escuchar algunos recopilatorios
de los Ramones, uno de mis grupos favoritos, que siempre me viene muy bien para
ponerme escribir.
-Por último, si Tony
Jiménez no fuera escritor, ¿a qué se dedicaría?
-Soy licenciado en Psicología, así que
seguramente intentaría ganarme la vida tratando de ahondar en la mente de los
hombres, ja, ja, ja. Estuve a punto de empezar los estudios de criminología,
así que de no escribir igual estaría persiguiendo a alguna clase de Hannibal
Lecter.
-Muchísimas gracias por
dedicarnos un rato de tu apretada agenda. Esperamos con impaciencia que todos
tus proyectos (los que acaban de salir a la luz y los que vendrán) tengan gran
éxito y que sigas siendo uno de los mejores exponentes del género literario de
fantaterror de nuestro país.
-Gracias a vosotros. Ha sido un auténtico honor
visitar este acogedor psiquiátrico. Muchas gracias por vuestras amables palabras
que han acompañado a tan magníficas preguntas, pero ¿ya me tengo que ir? ¿Me
vais a echar? No, yo quiero una celda para mí. ¡No estoy cuerdo, por amor de
Dios! ¡No estoy cuerdo!
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