Sinopsis:
¿Qué tienen en común un Terrier de Yorkshire asesino a
sueldo, un ama de casa que abronca fantasmas, una mujer cuya sombra le hace la
vida imposible y un tipo al que todo el mundo odia al instante? Que todos ellos
son Etéreos, personas (y perros) que han pagado a la misteriosa Éter por
obtener dones aleatorios. Algunos salen mejor parados que otros.
Aniel Dominic nos
trae ocho historias de Etéreos, ocho relatos en los que tener un gran poder no
necesariamente conlleva una gran responsabilidad.
Opinión:
Con esta sinopsis tan interesante y desconcertante a la vez,
Aniel Dominic nos presenta un grupo
de personas con poderes de lo más disparatados. Debo confesar que, desde que
leí la parte trasera de esta obra, me cautivó. Y la novela no defrauda.
El Club de los
Etéreos se compone de ocho relatos con un nexo en común: el poder que Éter
les concede a sus protagonistas y que les hace la vida, de alguna manera, más
interesante.
Aniel Dominic
tiene una forma de narrar directa, cuidada (se nota mucho que se ha
documentado) y divertida. Otra de las cosas que me han gustado es que algunos
relatos estén conectados, haciendo que sigamos a algunos de los personajes
durante más tiempo de lo que pensábamos.
La verdad es que me lo he pasado pipa leyendo las aventuras
de estas personas tan distintas.
Pero vamos a hacer las cosas bien, y comentar cada uno de
los relatos que componen la novela. Eso sí, sin spoilers, para no arruinaros las sorpresas.
- Éter: Excelente
carta de presentación. Éter es uno
de los relatos que más me han gustado, y con el que más me he reído. Un
personaje que brilla con luz propia y que es la causante de todos los
quebraderos de cabeza de los demás protagonistas de este libro.
- La broma del
chirrido picante: Como ya he dicho, esta obra es original, y este relato no
está exento de ello. Un ladrón con un don que le hace facilita su trabajo, que se las verá con un
justiciero bastante… extraño. Una auténtica locura.
- Un hueso duro de
roer: Con él que me reí y mucho. Ingenioso y original. Un asesino a sueldo
muy peculiar y un malvado digno de competir con los grandes villanos del cine
de James
Bond.
- El club de los
inanes: Un extraño grupo de etéreos poco contentos con sus poderes. Contiene
muy buenos personajes que merecen tener su propia historia (Ejem, ejem… Alex y Malasombra… ejem,
ejem)
- Ms. No: ¿Qué
ocurre cuando tienes superpoderes y todos los villanos de la ciudad están
encabezonados en hacerte la vida imposible? En este relato nos encontramos con Anette,
una pintora con un tamaño descomunal a la que no dejan en paz. Me gustó el
personaje de la misteriosa Talula.
- Hajime: Otro de
mis favoritos. Ambientado en Japón, gira en torno a un abuelo y su nieto, que
deben hacer frente a un monstruo gigantesco. El drama y el humor se mezclan en
esta historia que me recordó a Pacific
Rim en algunos momentos, cosa que me encanta. El final no te lo esperas.
- El regalo: Muy
bueno. Me sacó más de una sonrisa, y comprendes a la perfección que muchos de
los dones de Éter deben ser más un problema que una bendición. Nada es lo
que parece. Con guiño a una famosa serie de televisión.
- Blanditos poco
escandalosos: Original, con grandes dosis de acción y humor, y un buen
toque de Serie B, el último relato es
adrenalina pura.
¿Lo recomiendo?
Sin duda alguna. Es un libro divertido, ameno y escrito con
mimo, algo que se agradece, y mucho. Se trata de una antología regular, ya que
si bien hay algunas partes que me han gustado más que otras, he disfrutado con
todas, por lo que en ningún momento se hace pesada.
Te hará pasar un muy buen rato, por lo que desde el Asilo, la recomiendo.
0 comentarios:
Publicar un comentario