Hola a todos. Antes de nada, agradeceros que estéis leyendo estas líneas en las que os hablaré de Sueños de Acero Fundido. Una novela en la que participo y que supone mi primera publicación profesional (publicada en papel y con editorial de por medio).
Todo
empezó como me ocurre muchas veces: metiéndome en un grupo literario de
Facebook en el que pretendían realizar una antología (tal como pasó con
Vampiralia). Pero no una habitual. La idea de Jonathan Ponce de Haro, Sergio
Perez Corvo y Pau Varela (autor de Pandora Despierta) era escribir relatos independientes
con mechas (aka robots gigantes) en sus páginas. La verdad es que no dudé ni un
instante a la hora de meterme en un proyecto tan original y que llevaba por
título Sueños de Acero Fundido. Y de repente estaba rodeado de escritores
deseosos de empezar a escribir sobre gigantescas maquinas robotizadas. Pero
pronto, todo cambió (para mejor, claro).
Aunque
al principio todo iba ser muy modesto (autopublicándonos y por digital), eso
cambió con la llegada de Juan de Dios Garduño. Sí, el autor de Y Pese a Todo...
y El Arte Sombrío nos propuso cambiar antología por novela, que además estaría
acogida por Palabras de Agua. Editorial que ya tiene un buen número de obras
editadas de todos los géneros y para toda clase de públicos y edades (Calles de
Chatarra, Fuegos Fatuos, Bajo tu luna y El Hacedor de Agua, son solo unas
cuantas obras de su creciente catálogo...). ¿Una novela escrita a tantas manos?
Bueno, era algo complicado, pero no imposible (mira Wildcards). Este fue el
origen de Sueños de Acero Fundido.
Entonces
empezó el trabajo duro. Un trabajo que duró un año. Un año en el que todos los
autores dimos lo mejor. Un años en el que escribimos capítulos y capítulos de
esta historia que fue tomando forma a partir de una idea de Juande. Es
increíble mirar para atrás y descubrir la cantidad de textos que se quedaron
por el camino. Echar un vistazo cuantas clases de rumbos podría haber tomado la
obra. Pero creo que el resultado final es el ideal.
Todo
esto ha sido una experiencia impagable para alguien como yo. Un joven autor que
solo ha visto sus textos publicados en blogs y revistas virtuales. En el grupo
de Sueños de Acero Fundido he conocido a una buena cantidad de estupendos
autores que ahora considero grandes compañeros de letras. Con ellos, ayudé a
edificar un universo propio. No se me olvidarán todas las horas que pasamos
valorando cada escrito presentado, cada apreciación y consejo. Reconozco que no
todo ha sido un camino de rosas y que alguna que otra vez surgió alguna
discrepancia o pequeño conflicto, y que en el resultado final no estámos todos
los que conformaban la, llamémosle, compañía literaria original (a todos ellos,
les envío un saludo y abrazo), pero al final no dejamos de mirar para delante y
seguir con el proyecto. Además, me gusta pensar que he mejorado como escritor.
Ahora
hablemos de lo que el lector se va a encontrar en Sueños de Acero Fundido:
Seguro
que muchos habéis crecido con Mazinger Z, Robotech, La Visión de Escaflowne o Mobile
Suit Gundam. Y otros tantos (entre los que me incluyo) lo habrán hecho con
Evangelion, Code Geass o Tengen Toppa Gurren Lagann. ¿Qué tienen en común todas
estas series? Pues que en todas ellas podíamos ver gigantescas maquinas de
metal tripuladas.
El
anime se ha valido de los mechas (así se conocen los robots gigantes) para
contarnos increíbles historias de acción, lucha y supervivencia de la
humanidad. Aunque no solo la animación japonesa ha hecho uso de ellos. Podemos
verlos en videojuegos como Metal Gear,
Zone of Enders, Armored Core... Y en el cine también hemos tenido
nuestra querida dosis con los exoesqueletos de Aliens o Avatar, el AT-AT de
Star Wars y, por supuesto, los Jaegers de Pacific Rim. Pero lo cierto es que en
la narrativa poco se han utilizado a los mechas. Y menos en España. De hecho,
creemos que antes de Corazón de Piedra: Hecatombe (escrito por Francisco José
Palacios Gómez, autor que también participa en esta novela), no hay
ninguna obra relevante que trate del tema.
En
Sueños de Acero Fundido descubriréis a los Titanes. Máquinas de varios tamaños,
con las que la humanidad podrá hacer frente a una peligrosa amenaza que surgirá
de las entrañas de la tierra.
¿Sabéis
lo que es un kaiju? Es una palabra japonesa para designar a una "bestia
extraña" y es usada para referirse a gigantescas criaturas que atacan o
defienden a la humanidad. Godzilla, King Kong, Mothra, Rodan... son solo unos cuantos de los nombres de los
kaijus más famosos. Aunque hace poco que hemos podido descubrir a monstruos
gigantes como el del film Monstruoso o los kaijus de la ya citada Pacific Rim.
Por
supuesto, en una obra así, no podían faltar gigantescas amenazas que
combatirán los mechas. Pero os sorprenderá descubrir la clase de kaijus que
hemos preparado. Os lo aseguro.
Encontramos
en Los Mitos de H. P. Lovecraft el toque de gracia para nuestra obra. Hemos
tratado de homenajear al solitario de Providence y nos hemos dejamos
influenciar por su obra, que hemos reconvertido para hacerla propia y que sea
pilar clave de Sueños de Acero Fundido.
Y
para rematar el asunto, la novela cuenta con un excelente apartado artístico.
Para empezar por su portada, obra de Daniel Medina Campos. Y las muchas
ilustraciones que acompañan cada capítulo, realizadas por artistas como
CalaveraDiablo, Rubén Megido Sánchez, Claudio Sánchez Viveros y Conrado Martin.
Me
ha encantado trabajar con tan buenos y grandes artistas y haber firmado el
epílogo de esta obra, en la que me he dejado influír, cómo no, por las escenas
post-créditos de las películas de Marvel Studios (sobre todo con la de Capitán
América: Soldado de Invierno). Con la que espero dejar con ganas de más al
lector.
Os
dejo la sinopsis:
“Clara
Barnett ha nacido en un mundo que toca a su fin, asolado por un mal surgido de
las entrañas de la Tierra, cuya única ambición es la de exterminar a la raza
humana. Adiestrada toda su vida para pilotar las potentes máquinas de guerra
con las que tratan de mantener a raya a la legión de monstruos, Clara no es
solo el resultado de un experimento genético, un arma en forma de niña creada
para la guerra, sino que en ella reside también el poder de reconstruir el
mundo… o hacerlo arder por completo.
Sueños de acero fundido es una antología
novelizada. Una novela escrita a varias manos en la que los autores vierten
influencias tan dispares entre sí como la animación japonesa, el cine de
samuráis, el blockbuster hollywoodiense y el terror gótico de los mitos de
Cthulhu. Una obra cargada de acción sobre los demonios externos e internos que
acechan al hombre y la desesperada lucha por la supervivencia de la raza
humana”.
¿No
os ha entrado curiosidad?
Sueños
de Acero Fundido verá la luz dentro de nada. Y si reservais vuestro ejemplar
escribiendo a la editorial palabrasdeaguaeditorial@gmail.com
lo tendréis en vuestra casa sin gastos de envío... pero solo hasta el 2 de
marzo.
Espero
que disfrutéis de la obra tanto como nosotros lo hemos hecho realizándola.
3 comentarios:
¡Que interesante! Kaijus, Lovecraft, samurais... una combinación deliciosamente explosiva! Mucho éxito preveo para esta obra :)
Saludos
Gracias por leer el reportaje. Sí, eso esperamos que sea Sueños de Acero Fundido: un éxito :D
¡Gracias por la mención, compañero! Ahora... ¡a petarlo! Un abrazo :).
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